Un nicho de negocios, los vehículos eléctricos
Los vehículos eléctricos están ganando cada vez más cuota de mercado en el mundo, muchas de las grandes ciudades están tomando medidas para impedir que por sus calles circulen los que montan un motor de combustión y dando facilidades económicas y rebajas de impuestos para que se cambien a uno eléctrico.
Los fabricantes están invirtiendo en el desarrollo de tecnologías con un nivel de electrificación cada vez mayor, los motores eléctricos son los que se encargan de la tracción del vehículo cuando se mueve en entornos urbanos, una característica común en los híbridos puros, los híbridos enchufables y los eléctricos.
Todas estas tecnologías incorporan nuevos componentes, como las baterías de alta tensión, los cargadores eléctricos, los convertidores de tensión, los inversores, los rectificadores y por supuesto los motores.
La demanda de talleres para vehículos eléctricos todavía no representa un porcentaje importante, pero también es cierto que la oferta es mínima. Aprovechar esa circunstancia y anticiparse a la competencia podría hacer que el taller esté bien posicionado cuando los números se inviertan y el mercado se incline definitivamente por este tipo de automóviles.
Lo básico en la atención de vehículos eléctricos
En un escenario con mayor número de vehículos eléctricos, se hace necesaria la preparación de los técnicos en electricidad y electrónica. Muchos fabricantes ofrecen formación para la reparación de sus modelos, una oportunidad interesante para especializarse.
Además, los vehículos eléctricos tienen una mecánica más sencilla al desaparecer todas las piezas que componen y acompañan al motor de combustión, lo que implica que requieren mantenimientos menos continuos, porque no necesitan cambios de aceite o filtros y el desgaste es menor porque no hay roce con los pistones o el cigüeñal.
Sin embargo, cobra importancia el mantenimiento de componentes como el aislamiento de todos los cables, motores y baterías, más espaciados en el tiempo, pero también más costosos.
Los neumáticos de los vehículos eléctricos tienden a desgastarse más en el momento del arranque, el motor tiene líquido refrigerante y siguen siendo importantes los mantenimientos del sistema de suspensión, la alineación de la dirección y los discos y pastillas de frenos.
En qué invertir para reparar un vehículo eléctrico
Tal vez la inversión más importante para el mantenimiento y reparación de los vehículos eléctricos se centre en el personal especializado. Los mecánicos requerirán una formación diferente a la que han venido teniendo desde que se inventó su profesión y los conocimientos en electromecánica serán fundamentales.
También será necesaria una inversión en seguridad para llevar a cabo las reparaciones de este tipo de vehículos, teniendo en cuenta que piezas como el inversor, la batería de alto voltaje, las piezas con alta tensión y el sistema de desconexión del servicio pueden provocar un accidente muy grave si no se manejan adecuadamente.
En cuanto a las instalaciones del taller, será necesario un box eléctrico con equipos y herramientas que permitan trabajar de forma segura, también que los bancos de trabajo metálicos se cambien por plásticos que no conducen electricidad si se manchan con aceites o grasas.
Otro elemento imprescindible es la instalación de puntos de recarga, necesarios para poder atenderlos, cargarlos y mantenerlos mientras permanezcan en el taller, además serán un reclamo atractivo para los usuarios.
El cambio al vehículo eléctrico no es inminente, pero comenzar con la adaptación de una zona del taller para atenderlos será una buena inversión a mediano plazo. Es la oportunidad de empezar con la transformación para ir abriéndose camino en este nicho de mercado.
Por. Adriana Gutiérrez